Neuromoduladores
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¿Qué son los neuromoduladores?
Los neuromoduladores son sustancias derivadas de una toxina purificada que, aunque originalmente está asociada al botulismo, se utiliza desde hace décadas con total seguridad en medicina y estética. Su aplicación controlada permite relajar los músculos faciales responsables de las arrugas de expresión, logrando un rostro más suave, descansado y rejuvenecido sin necesidad de cirugía.
Al ser inyectados en puntos estratégicos, los neuromoduladores bloquean temporalmente la señal entre los nervios y los músculos, reduciendo su contracción. Esta relajación muscular permite atenuar arrugas dinámicas como las líneas de expresión del entrecejo, la frente o el contorno de los ojos («patas de gallo»).
¿Qué tenemos que tener en cuenta?
Algunos posibles efectos adversos son:
- Dolor, hinchazón o hematomas en el lugar de la inyección
- Dolor de cabeza o síntomas similares
Antes del procedimiento:
La mayoría de gente no siente ninguna molestia durante el procedimiento. Sin embargo, es conveniente que antes le adormezcan la piel.
Durante el procedimiento:
Las inyecciones de neuromoduladores suelen aplicarse en el consultorio médico. El método utiliza una aguja delgada para inyectar pequeñas cantidades de toxina botulínica en la piel. La cantidad de las inyecciones necesaria depende de muchos factores.
Después del procedimiento:
- No frotes ni masajees el área del tratamiento durante 24 horas. Esto puede ayudar a evitar que la toxina se disemine a un área diferente
- No vayas a piscinas o saunas
- No consumir grandes cantidades de alcohol
- No comprimir la zona
- No tumbarse tras hacerse el tratamiento
Podrás volver a tus actividades normales inmediatamente después del procedimiento.
Preguntas frecuentes
¿En qué consiste exactamente?
La toxina se administra en su dosis adecuada mediante inyecciones practicadas con agujas muy finas a nivel intramuscular o subcutáneo, logrando una relajación del músculo dónde se inyecta.
¿En qué zonas se administra?
Actualmente su uso con fines cosméticos ha sido aprobado para el tratamiento de las arrugas de expresión de la zona del músculo frontal, entrecejo y la zona peri-orbitaria.
¿Su aplicación es dolorosa?
Únicamente se percibe una leve molestia que dura muy pocos segundos. Asimismo, se puede usar crema anestésica media hora antes del tratamiento.
¿En qué momento se aprecian sus efectos?
Se ven de forma gradual, los resultados comienzan a hacerse visibles unas 48 horas tras la aplicación, manifestándose de forma plena al cabo de unos diez días tras el tratamiento.
¿Qué duración tiene su efecto?
Dependerá de cada paciente, por norma general, se mantendrá entre seis y diez meses, desapareciendo de forma progresiva.
¿Existe un límite de sesiones?
No es malo realizarse unos cuantos tratamientos, dejando siempre los plazos recomendados entre cada sesión.
¿Qué cuidados hay que realizar tras la intervención?
Se recomienda mantener la cabeza erguida durante las cuatro horas posteriores. Asimismo, no se puede tomar aspirina para no provocar hematomas ni realizar sesiones de sauna o acceder a espacios muy calurosos durante los días siguientes.
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